El grupo de "Los treinta"

Hace aproximadamente 17 años, se inició una historia de amistad, la que en su comienzo sólamente tenía como protagonistas a Cecilia (la "ratona" de amarillo, como le dice Jaime) y a mi. Por distintos motivos, siempre estuvimos en contacto, y poco a poco, se fueron agregando a esta aventura de compartir, otros dos personajes más. En primer lugar, el futuro esposo de Cecilia (gracias a mis dotes de casamentero) y junto con él, su amigo de toda la vida, Juan Francisco (polera roja c/ sandía incluida). Los años y las vueltas de la vida, nos han hecho avanzar por un sinnúmero de situaciones y pruebas, que poco a poco nos han ido cambiando la vida y permitiendo también afianzar el lazo que se produce entre nosotros. Puedo afirmar que tal como dicen; "con el paso de los años, los amigos que quedan y se mantienen son pocos y los conocidos muchos".

Aunque parezca extraño, por diversos motivos, nunca habíamos podido tener la oportunidad de compartir todos juntos un período de vacaciones y así relajarnos en buena compañia. Este año, por gracia de Dios, y sin planificarlo demasiado pudimos realizar algo que siempre planificabamos, pero que por diversos motivos se iba a pique. Acá estamos disfrutando de un agradable día de playa, lo que fué totalmente reponedor (sin mencionar las ricas cervecitas que nos esperaban en la noche je je je). Uno de los motivos por los que este viaje se transformó en algo tan agradable, debe haber sido el hecho que ya nos conocemos demasiado, por lo que sabemos con quien contamos al lado y qué podemos esperar del otro. Debo agregar que por mi parte, siempre puedo esperar una mano amiga y un grupo de personas en quienes confío plenamente.

En esos días pudimos olvidarnos de todos y de todo. Es algo que necesitabamos realmente, y algo que lo favoreció es que dentro de este "Club de Tobbie" (Con la pequeña Lulú incluida y todo), tenemos muchos gustos y hobbies en común. Somos de cosas sencillas y de mucho conversar. Así es que pueden imaginarse que el ambiente era como a pedir de boca.

Hoy martes, a sólo cinco días del fin de mis vacaciones, estoy haciendo algunos quehaceres domésticos; incluyendo algunas reformas en mi pc, y algunos de mis pasatiempos (pelìculas, libros, mascotas). Me cuesta asumir que si las cosas no cambian, tendré que continuar con mi trabajo como analista, sin poder comenzar a ejercer mi carrera como Profesor de Enseñanza Básica. Bueno, creo que por mi parte he hecho todo lo posible para que esto se cumpla, por lo que intentaré asumir lo que venga (aunque debo confesar que con poco ánimo.). Resulta un poco frustante el saber que puedes y tienes mucho que entregar, pero que no puedes hacerlo; pero que le vamos a hacer. (mejor no sigo hablando de eso; este blog comenzó muy animado y la estoy embarrando con estos pensamientos pesimistas.)

Bien, la idea era contarles algo de mi verano y de mi entorno. Tengo otras cosas que me gustaría comentar, pero prefiero dejarlas para otro artículo. Espero sigan leyendome.